Google lanzó a finales del mes de abril una de las actualizaciones más importantes de la historia reciente de Gmail. Su popular servicio de correo cambió de interfaz e introdujo numerosas novedades para la versión escritorio. Sin embargo, algunas de esas novedades se quedaron en el camino en su tránsito hacia la versión móvil, que poco a poco va recibiendo las mejoras. Una de ellas, una de las más últiles, llegó a Gmail esta misma semana: el envío de correos confidenciales. Desde ya mismo puedes mandar correos especiales que sólo se pueden abrir con una contraseña o que se autodestruyen después de un tiempo limitado.
Primero de todo: comprueba que tu aplicación de Gmail, ya sea para Android o para iOS, esté actualizada a la última versión. Dicho esto, qué es un mensaje confidencial y cómo puedo enviarlo desde el móvil.
¿Qué es un correo confidencial?
Básicamente, un correo confidencial es un mensaje con un grado de privacidad mayor que uno normal. Estos mensajes tienen la particularidad de que no se pueden reenviar, aunque su función más destacada es sin duda su fecha de caducidad. El emisor del mensaje puede marcar una fecha de expiración para ese correo, de forma que éste desaparecerá pasado el tiempo fijado. Puede ser entre un día y cinco años. Superado ese plazo, el remitente del mensaje no podrá abrir el correo ni descargar aquellos ficheros adjuntos que contenga.
Además de configurar la caducidad, la otra gran diferencia de este tipo de correos es que el emisor fija una contraseña para el correo, de forma que éste sólo se abrirá si previamente se introduce la clave. Google es el encargado de generar la contraseña y de enviarla al remitente del correo confidencial.
Cómo enviar un correo confidencial
Para mandar un correo confidencial desde tu teléfono móvil, abre la aplicación de Gmail y haz clic en el botón de "Redactar", como si fueras a escribir un correo normal. Ahora, en lugar de introducir el destinatario y el asunto, así como de empezar a redactar, deberemos pulsar sobre los tres puntos suspensivos de la esquina superior derecha. Accederemos a un menú de configuración donde se activa el "Modo confidencial".
Desde el siguiente menú podremos configurar los dos elementos principales de los que hablábamos antes: la caducidad del correo (entre 1 día y 5 años) y "Requerir contraseña", que nos servirá para poner una barrera de acceso al mensaje. En este caso, podremos elegir si queremos que la contraseña se envíe a la propia dirección de correo a la que mandamos el mail o vía SMS a un teléfono móvil que indiquemos. Cuando hayamos fijado la configuración, hacemos clic en el tic de la esquina superior derecha y entraremos en el modo seguro.
Como verás, se trata de la página de redacción de correo habitual, sólo que en la parte inferior aparece un recuadro en la que aparece la fecha de expiración del correo. Además, Google especifica que el mail no se podrá reenviar, descargar ni copiar su contenido. Eso sí, si alguien decide hacer un pantallazo de la información del correo, Gmail no tendrá forma de evitarlo.
La parte negativa de esta nueva funcionalidad es que no se puede establecer por defecto. Eso significa que cada vez que quieras mandar un correo confidencial tendrás que repetir el proceso mencionado.
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